Una semana más Julio a los mando de esta Newsletter. El tema de hoy…
No vas a lograr todo lo que te propongas.
Es un mensaje duro pero necesario, no podía empezar de otra forma el email de hoy. Pero cuidado, esto no es malo. Ni mucho menos.
Lo que pasa cuando haces cosas, no siempre será lo que esperas pero te sorprenderá.
Hace un tiempo leí una historia que me hizo entender la importancia de la gestión de expectativas y de seguir haciendo cosas.
Todo el mundo conoce a Metallica. Si no conoces a este grupo de metal, puedes cerrar este email ahora mismo.
Uno de los integrantes que formó el grupo, Dave Mustaine, era una persona bastante peculiar.
Le encantaban las drogas y el alcohol, surprais.
Por este motivo, los otros fundadores decidieron expulsarle del grupo.
Mandaron a nuestro amigo Mustaine de vuelta a casa en un bus de 48 horas. Podemos hacernos una idea de lo que sentía Dave.
En el camino, ideó un plan magistral: crearía su propio grupo y sería mejor que Metallica.
¿Y sabes que pasó?
No consiguió nunca superar a Metallica, pero MegaDeath (su nuevo grupo), consiguió decenas de nominaciones a los Grammys, varios discos de oro y platino, llenó estadios y se hizo inmensamente rico.
Dave nunca consiguió olvidar a Metallica, pero jamás paró de hacer cosas. Sus expectativas no se cumplieron, no llegó a ser más grande que sus excompañeros, pero el hecho de haber seguido en el camino de la música le llevaron a crear un grupo mega conocido mundialmente.
Esta reflexión vino a mi la segunda sesión con el psicólogo.
Muchas veces vamos hacia A y terminamos en B, pero no podemos luchar contra ello.
¿Cuántas veces las cosas han salido tal y como planeas?
Mi gestión de las expectativas era una mierda, si no conseguía algo me frustraba y terminaba peor de lo que empecé.
Ahora lo veo con perspectiva y digo, qué locura que no pudiese ver algo tan simple, pero así es.
Es importante que las cosas salgan como quieres, pero la base de todo es seguir haciendo. Si no estás en el lugar que quieres, remar te hará avanzar. Hay veces que irás haciendo donde quieres y otras que no, pero algo pasará.
Más de una vez he querido paralizar el proyecto de HooL Investor (por el que la gran mayoría me conoceréis), pero siempre he aplicado una regla:
Sigue escribiendo 30 días más y luego paras.
Pero cuando pasa ese periodo, mágicamente han pasado cosas que hacen que siga. La primera vez que esto sucedió pasé de querer abandonar HooL a facturar más de 45.000€.
Pero esa historia ya la conoces. O bueno, conoces el lado que todos quieren ver. Pronto hablaremos de cómo lo hice yo y que me supuso mentalmente.
Nos vemos pronto, la semana que viene vuelve Luís.