Día 15 - Descansa, amigo
Ayer a última hora sucedió algo mientras estaba en el fisio pediátrico con mi hija que quería contarte pero…
Creo que no es el momento.
Hoy, durante mi lectura de primera hora, he leído una idea que llevo practicando años.
Es tan sumamente densa que podría escribir 10 emails sobre ella.
Y quizá lo haga algún día.
Pero hoy, voy a intentar que te quedes con lo esencial.
‘‘Descansar es la verdadera llave al progreso’’
Estoy cansado de la gente altamente productiv, en el mal sentido de la palabr.
Me dan pereza.
Hemos creado un mensaje donde el que más hace es siempre el que más resultado obtiene.
Y mis cojones.
Trabajar inteligente es mejor que trabajar duro.
La cosa es que hoy he leído sobre algo llamado ‘‘supercompensación’’.
Algo así como alternar periodos de gran esfuerzo cognitivo/físico con descansos.
Cuando entrenas fuerza, ganas músculo durmiendo, no entrenando.
La cosa es que yo siempre he actuado de la misma forma ante el trabajo.
Me gusta organizar grandes sesiones maratonianas de 1 sola tarea para luego descansar.
Por ejemplo, en mi otra newsletter donde hablo del sector inmobiliario, dediqué 3 días seguidos a escribir todas las ediciones de este año.
Más de 12 emails de una profundidad potente creados en 72 horas.
Y el jueves, descansé.
Ante todas las tareas, todos los momentos, programo descansos para recargar las pilas:
Concentración.
Energía física
Disposición emocional.
Fuerza de voluntad.
Y los resultados son siempre mejores.
No podemos ser máquinas eficientes las 24 horas del día.
Descansa, no lo dudes.
Nos leemos mañana, que tengas buen día.
PD: pero no uses este email para reforzar que puedes ser más perro que Niebla, que tenía todos los Alpes para él y estaba con Heidi en la casa.